Queda demostrado que un día tienes a la persona que quieres y con la que te gustaría pasar el resto de tu vida de su mano y al otro día sólo tienes el recuerdo de ese sentimiento. Cuando crees que algo va mal no todos van a la búsqueda de tu solución, hay gente que prefiere olvidarte y culparte de tus errores y de incluso los suyos, pero una persona no nació para aferrarse a que todo le salga mal, o que siempre tiene errores, cada error es un nuevo comienzo lo mismo que no hay final que no termine con otro principio. Cuando creo que la vida no me puede sonreír, que no me queda nada ni nadie por lo que pintar una sonrisa en mi cara, siempre aparece la familia y me da el empujón que necesito, siempre te sorprendes a ti mismo, y te superas en cualquier cosa, y siempre me demuestran una y otra vez que si hay alguien a tu lado. Para demostrar que eres feliz no necesitas ir con los mejores bolsos y con los mejores zapatos, es más no necesitas demostrar nada porque una sonrisa en la cara, simple, serena, atrevida, enloquecida, espontánea, y sobre todo real, hace que tu vida cambie, tu cambies y los demas cambien, porque una persona feliz quiere todo el mundo, una persona seria y triste no quiere nadie. Así que ver las cosas con otra perspectiva o con color te demuestra que todo puede cambiar que puedes evitar lo malo y pintarlo a tu manera y puedes ser tú pero siempre FELIZ cómo cuando de niña jugaba a las cocinitas, los platos estaban vacíos pero se trataba de imaginarlos llenos y creer que eras cocinero, te divertías porque tu mente te obligaba a ver que era un juego y no a ver que no había nada y que no eras lo suficientemente grande como para usar comida de verdad. La realidad tiene dos caras, la que ves y la que quieres ver.
